OBRA DESTACADA

Draco

La escultura forjada a mano en bronce macizo de 80 kg, encarna un imponente dragón guardián occidental ataviado con armadura samurái.
En sus garras porta un orbe cristalino lleno de agua, símbolo viviente de la Tierra que canaliza energías y repele la negatividad.
Draco, señor de la Tierra y guardián pentadimensional, custodia las fronteras entre dimensiones: su cuerpo es un portal cósmico que nadie atraviesa sin su permiso.

Centinela eterno de los umbrales del cosmos, su orbe de agua refleja y protege la vida.